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Reencarnación

2024
El bebé, que llora en el cuarto de al lado, hoy experimentó la conciencia absoluta. Detrás de la ventana lo observo fijamente, el pequeño bebé que, en su inmóvil retraso de vida, incapaz de recordar su antigua vida cada día, lloraba por pensar qué pasaría con el cuerpo que había abandonado aquel día. Y descubrió que el infierno era el primer estado de conciencia: inmóvil e incapaz de entender un idioma o lo que los animales llaman comunicarse. Sin embargo, el ruido no cesaba: melancolía de ser pensante. No hay nada más triste que olvidar, no hay nada más triste que volver a vivir. Al querer escapar, te encontraste contigo. No puedes decirme si conoces a Dios o si es verdad que no existe nada. En bucle se repite, se repite, se repite. Nadie escapa, todos temen, todos lloran sin parar. La tierra se los come, pero escupe sus almas al vacío inhóspito: a la izquierda, a la derecha, detrás y adelante. Se repetía el llanto de otros 29. ¿Por qué vivir? ¿A qué viene morir? ¿Qué significa volver a nacer?